Experiencias: matrimónio
En esta Sección Llamada Experiencias; contaremos diferentes tipos de experiencias vividas por mi y por algunos de los seres que a lo largo de mi vida me han enriquecido con sus historias. Acá aplicaremos algunas de las leyes de la vida y razonamiento con cerebro de corazón para que realmente te nutran y te impulsen a dar el siguiente paso en tu transformación, sin estar esperando aprobación de otros, sus opiniones.
Hace algún tiempo entro a consulta un chico muy especial, muy latino, muy mejicano, en otras palabras, con la programación del muy macho.
Me dice “María, por favor, colabóreme estoy muy afanado, mi matrimonio se vino a pique y no sé qué hacer”:
- Me conto que hacia 7 años se había casado con una chica a la que amaba mucho de la parte sur de Colombia.
- Me contó, que ella le encantó por su dedicación a todo lo que hacía,
- Que cuando novios el la invitaba a Cine, restaurantes, le regalaba flores, que en general era muy detallista.
- Que posterior a haberse casado, dejó los detalles a un lado. Y, que cuando la vio rara después de un año le pidió que tuvieran un bebé, que la tenía la idea que un bebé lo solucionaría todo.
Entonces yo le pregunté realmenteː ¿qué tan dispuesto estaba a salvar su matrimonio? Y el me dijo que haría lo que fuese.
Yo le recomendé que como ella ya había recibido los primeros halagos cuando eran solteros, que recordara que esos detalles eran importantes siempre.
Así, que era importante que la sorprendiera otra vez con las flores, cine, de vez en cuando el restaurante y que esta vez era importante que la sorprendiera con algo de lo que ella hacia para él, que generalmente cuando nosotras aplicábamos crema en los pies de nuestros compañeros nosotras también queríamos lo mismo.
Adicional, le recomendé:
- Que cocinara de vez en cuando, me diceː “María yo no sé cocinar”, con mayor razón; le sugerí que aprendiera algunas recetas en YouTube, nuestra academia las 24 horas. Y el silencio solo me miraba.
- Lava tu ropa, la de ella y la del bebé una vez al mes para darle a ella la oportunidad de variar sus quehaceres. Su respuesta fueː “María yo no sé hacer la lavandería”; entonces le propuse que le dijera a ella, “Corazón, ¡hoy te colaboro con la lavandería! ¿qué hago y cómo? Quiero compartir tiempo contigo”.
Y, asi hice varias sugerencias y acordamos una cita para el mes siguiente, mientras hacía algunos ejercicios de empoderamiento, y algo de escritura.
Al mes siguiente regresó y su historia fue muy desalentadora para él. Me dijo que las cosas se pusieron peor.
¿Por qué?
“María, para serle honesto nada me funcionó. Hice lo que me pidió y con mucho esfuerzo, créeme, y no funcionó.”
Hijo pues es ahí la clave.
Tus valores no son coherentes con tus acciones.
“¿Cómo así?”
Si haces las cosas con esfuerzo no te salen fluidas y te envían en la dirección contraria de lo que haces.
“María, ahh, yo me sentía ridículo y poco hombre dándole regalos a mi mujer que se supone ya no tengo que conquistar, en mi pueblo se dice que es darle a entender que ella me tiene dominado.”
- “María, y eso de lavar la ropa me sentí tan humillado…
- “Y cocinando Wow, que vergüenza, sentí que ella me vería muy poco hombre para ella.
“Así María, yo la pasé muy mal.
“Nada de lo que yo hacia la contentaba y antes se enojaba o entristecía más.”
A ver hijo, ¿realmente quieres salvar tu matrimonio o te vas a quedar con la pendejada con la que fuiste programado por tu cultura, tu mamá y tu entorno?
Le propuse una total programación y un coaching por 66 días, asegurándole que, siguiéndome al pie de la letra, además de su transformación, su procedimiento sería placentero, y toda su vida e incluso todo su estilo de vida cambiaría, cerramos el trato.
Reservamos las etapas de hipnosis de 3 horas, también una hora diaria para que llegara a la oficina a hacer unas tareas bajo mi supervisión, sabiendo que en su casa no las haría por sus paradigmas anteriores.
Fueron dos meses muy dedicados, su esposa sabia que estaba haciendo un curso de liderazgo para ascender en la empresa, algo que él le decía para que ella no sospechara, según el era una mentira piadosa. Yo sabía, que lo que él decía se cumplía, así que lo dejé que prosiguiera con lo que supuestamente era su mentira.
Él Cambió, de forma de pensar, de estilo de vestir, de forma de participar con su compañera en la casa, y un mes después le propusieron en la empresa que asumiera el liderazgo de un proyecto nuevo.
Él estaba muy contento, y decidió contarle la verdad a su compañera de vida. Y, un día, me llamo y me concertó una cita de dos horas y llegó con su esposa, él le regaló a ella toda una reprogramación para empresaria conmigo por 150 días, en donde hicimos rediseño de vida.
Por el tiempo de la Reprogramación de Sonia, él salía de la empresa, la recogía en su casa, me la dejaba en la oficina, y él se hacia cargo del bebé y de algunos quehaceres.
Los dos son empresarios felices, Los dos comparten la maternidad y paternidad con amor y compañerismo. Los dos son productivos financieramente. Todo eso más el agradecimiento por algunos trucos que desarrollamos en pareja para enriquecer sus encuentros íntimos.
Estoy tan feliz y agradecida que las personas que llegan a mí y se quedan con corazón a hacer sus transformaciones de verdad cambian.
Usted no esta Destinado; Usted está programado.
Ahora le toca a usted. Contácteme y rediseñamos todo un estilo de vida.